Ciudad de México, México – La presidenta de México descartó este miércoles la posibilidad de establecer un tratado de libre comercio con Brasil, enfatizando que el país se enfocará en fortalecer sus relaciones económicas y comerciales con otras regiones y socios estratégicos.
Durante una conferencia de prensa, la mandataria explicó que, aunque México mantiene relaciones diplomáticas y comerciales con Brasil, actualmente no hay planes para iniciar negociaciones formales de un acuerdo de libre comercio. “Nuestra prioridad es consolidar los tratados que ya tenemos y explorar oportunidades que beneficien directamente a la economía mexicana”, señaló.
El tratado de libre comercio México-Brasil ha sido tema de debate en distintos sectores económicos, que consideran que un acuerdo podría incrementar el intercambio comercial y las inversiones entre ambos países. Sin embargo, la presidencia mexicana ha señalado que existen diferencias en términos regulatorios y políticas internas que hacen que, por ahora, no sea viable un acuerdo.
Analistas económicos destacan que México mantiene otros tratados de libre comercio estratégicos, como el T-MEC con Estados Unidos y Canadá, y acuerdos con la Unión Europea y Asia-Pacífico, los cuales son prioridad en la agenda comercial nacional. Además, apuntan que la diversificación de mercados sigue siendo un objetivo clave para garantizar la estabilidad económica del país.
Por su parte, el gobierno brasileño no ha emitido comentarios oficiales sobre la decisión mexicana, aunque los expertos consideran que la medida no afectará las relaciones diplomáticas, sino que refleja una estrategia de priorización económica por parte de México.
El anuncio de la presidenta se enmarca en un contexto global de revisión de acuerdos comerciales, en el que muchos países analizan sus alianzas para proteger industrias locales y fomentar el crecimiento económico interno. En este sentido, México busca consolidar sus ventajas competitivas y garantizar que cualquier negociación futura genere beneficios tangibles para la economía nacional.
Con esta decisión, la administración mexicana deja claro que, aunque mantiene la cooperación bilateral con Brasil en otros ámbitos, un tratado de libre comercio México-Brasil no forma parte de sus planes inmediatos.
